Siempre se ha dicho que una "vida de perro" es una mala vida... yo opino lo contrario.
Toda mi vida mi mamá estuvo en desacuerdo que trajéramos animales a la casa y siempre le desobedecí... tuvimos 2 pericos, chompipes (pavos), gallinas, un conejo (por una tarde) y 3 gatos (por no más de 2 semanas, excepto uno...que ella se encargó de regalar) y nunca hablamos de tener un perro.
Tres años después del último gato se me metió la idea de tener un perro. La televisión, películas y publicidad me convencieron que tener un perro sería la mejor decisión de mi vida, que sería mi amigo (así como Snoopy), que me protegería (como Marmaduke), y que siempre estaría feliz de verme (como Odie).
El 13 de noviembre de 2014 llegó a mi la oportunidad de adoptar un cachorro, un maltés de 4 meses llamado Lucas, yo dije que lo iría a ver y de repente estaba regresando a casa con él. El no sabía lo que estaba pasando y yo no sabía que hacer con el; la primera noche busqué en google
como hacer que le de sueño a un perro y solo encontré que si bostezaba frente a el eventualmente le darían ganas de dormir. Era tan pequeño que le costaba subir gradas y le dio tanta pena seguirnos que durmió en las gradas.
Le dije de su existencia a mi mamá por correo electrónico y ella me dijo que tenía que responsabilizarme al 100% de el. Ocho meses después es el rey de la casa y nos transformó una a una. Ahora lo conocen hasta los del agua cristal.
Lucas me ha enseñado lo que es una verdadera "vida de perro" y sé que es la mejor vida que existe:
-Se duerme donde cae y a pesar de estar dormido siempre está pendiente de cuando alguien llega a la casa.
-Se emociona con solo ver una bolsa de Cheetos. (Ya quisiera yo emocionarme tanto por algo)
-El sabe exteriorizar lo que siente sin hablar, solo tiene que mover su colita.
-La comida gourmet no tiene efecto sobre el, los calcetines son lo más delicioso del universo.
-No se preocupa por su apariencia, todos los días anda mechudo (despeinado) y el es feliz así.
-El no necesita salir a comprar, salir a caminar es suficiente.
-Las pelotas de tenis o las saki balls son un mejor entretenimiento que cualquier televisor HD/3D/Todo lo que termine en D.
-El no quiere sábanas de algodón egipcio, con su mantita de bebé es más que suficiente.
-El no necesita ir al spa, se baña cada sábado en la pila.
-El solo pide atención y cariño; y con eso es más que suficiente para el.
Esas y tantas cosas más son lo que de verdad conforman una "vida de perro". Y le doy gracias a Lucas por enseñarme.
-¿Quién necesita un parque de diversiones cuando me puedo subir a un columpio?